viernes, 23 de octubre de 2009

pablo neruda


PABLO NERUDA ...POEMAS...

El NUEVO SONETO A ELENA


Cuando estés vieja, niña (Ronsard ya te lo dijo),
te acordarás de aquellos versos que yo decía.
Tendrás los senos tristes de amamantar tus hijos,
los últimos retoños de tu vida vacía...

Yo estaré tan lejano que tus manos de cera
ararán el recuerdo de mis ruinas desnudas.
Comprenderás que puede, nevar en primavera
y que en la primavera las nieves son más crudas.

Yo estaré tan lejano que el amor y la pena
que antes vacié en tu vida como un ánfora plena
estarán condenados a morir en mis manos...

Y será tarde porque se fue mi adolescencia,
tarde porque las flores una vez dan esencia
y porque aunque me llames yo estaré tan lejano
...


SILVIA NATHALIA PLAZAS 11-02

SI SE QUIERE LLEGAR A SER UNA BUENA VICTIMA

Es necesario saber de toda la dulzura
que entrelaza al verdugo con la muerte
de la paciencia con que afila su hacha
de la soledad que ilumina su vida
y la de sus inocentes hijos
del esfuerzo que implica portar y levantar el arma
de la sangre que pringa sus pantalones
todas esas consideraciones deben estar presentes
en el momento de recoger nuestro pelo sobre la nuca
y poner en sus manos el pescuezo

1) cada vez que en el texto de Gomez jattin aparece la palabra de, al comienzo de un renglon es porque hay una
A) repeticion
B) anunciacion
C)enunciacion
D) reiteracion
2) en el texto raul gomez jattin, se nos plantea implicitamente que una buena victima
A) entiende de la dulzura con que el verdugo le va a dar la muerte
B) debe pensar en la soledad de los hijos del verdugo
C) no debe entregarse, sino entrelazar al verdugo con la muerte
D)ve a su verdugo como otro mortal.
3) desde un nivel interpretativo, los textos pueden compararse porque ambos establecen
A) una reflexion desde la victima
B) una reflexion sobre la victima
C) un protagonismo de la victima
D) a la muerte como protagonista

viernes, 16 de octubre de 2009

gabriela mistral


Hija de Juan Jerónimo Godoy Villanueva, profesor, y Petronila Alcayaga Rojas, modista de ascendencia vasca.[1] Gabriela Mistral nació en Vicuña, ciudad en la que hoy hay un museo[2] dedicado a ella en la calle donde nació y que hoy lleva su nombre. A los diez días sus padres se la llevaron a La Unión (hoy Pisco Elqui), pero su "amado pueblo", como ella misma decía, era Montegrande, donde vivió de los tres a los nueve años, y donde pidió que le dieran sepultura.

Sus abuelos paternos, oriundos de la actual región de Antofagasta, fueron Gregorio Godoy e Isabel Villanueva; y los maternos, Francisco Alcayaga Barraza y Lucía Rojas Miranda. La Mistral tuvo una media hermana, que fue su primera maestra, Emelina Molina Alcayaga, y cuyo padre fue Rosendo Molina Rojas.

Aunque su padre abandonó el hogar cuando ella tenía aproximadamente 3 años, Gabriela Mistral lo quiso y siempre lo defendió. Cuenta que "revolviendo papeles", encontró unos versos suyos, "muy bonitos". "Esos versos de mi padre, los primeros que leí, despertaron mi pasión poética", escribió.[3]

De niña sufrió al parecer una violación que la marcó de por vida, que "almacenó en su inconsciente todas las pruebas de que en cualquier momento el mundo, es decir el hombre, podía agredirla en forma salvaje".[4]

A los 15 años se enamoró platónicamente de Alfredo Videla Pineda, hombre rico y hermoso, más de 20 años mayor que ella, con el que se carteó durante casi año y medio. Después conoció a Romelio Ureta, un funcionario de ferrocarriles. Éste sacó un dinero de la caja del ferrocarril donde trabajaba con el fin de ayudar a un amigo; como no lo pudo devolver, Ureta se suicidó. Más tarde -a raíz de su triunfo en los Juegos Florales con Sonetos de la muerte, versos que relacionaron con el suicida- nació el mito, que tuvo amplia difusión, del gran amor entre ambos.

En 1904 comienza a trabajar como profesora ayudante en la Escuela de La Compañía Baja en La Serena y empieza a mandar colaboraciones al diario serenense El Coquimbo. Al año siguiente continúa escribiendo en él y en La Voz de Elqui, de Vicuña.

Desde 1908 es maestra en la localidad de La Cantera y después en Los Cerrillos, camino a Ovalle. No estudió para maestra, ya que no tenía dinero para ello, pero posteriormente, en 1910, convalidó sus conocimientos ante la Escuela Normal N° 1 de Santiago y obtuvo el título oficial de Profesora de Estado, con lo que pudo ejercer la docencia en el nivel secundario. Este hecho le costó la rivalidad de sus colegas, ya que este título lo recibe mediante convalidación de sus conocimientos y experiencia, sin haber concurrido al Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile. Posteriormente su valía profesional quedó demostrada al ser contratada por el gobierno de México para echar las bases de su nuevo sistema educacional, modelo que se mantiene vigente casi en su esencia, pues solo se le han hecho reformas para actualizarlo.


Chau número tres

Te dejo con tu vida
tu trabajo
tu gente
con tus puestas de sol
y tus amaneceres.

Sembrando tu confianza
te dejo junto al mundo
derrotando imposibles
segura sin seguro.

Te dejo frente al mar
descifrándote sola
sin mi pregunta a ciegas
sin mi respuesta rota.

Te dejo sin mis dudas
pobres y malheridas
sin mis inmadureces
sin mi veteranía.

Pero tampoco creas
a pie juntillas todo
no creas nunca creas
este falso abandono.

Estaré donde menos
lo esperes
por ejemplo
en un árbol añoso
de oscuros cabeceos.

Estaré en un lejano
horizonte sin horas
en la huella del tacto
en tu sombra y mi sombra.

Estaré repartido
en cuatro o cinco pibes
de esos que vos mirás
y enseguida te siguen.

Y ojalá pueda estar
de tu sueño en la red
esperando tus ojos
y mirándote.


Corazón coraza

Porque te tengo y no
porque te pienso
porque la noche está de ojos abiertos
porque la noche pasa y digo amor
porque has venido a recoger tu imagen
y eres mejor que todas tus imágenes
porque eres linda desde el pie hasta el alma
porque eres buena desde el alma a mí
porque te escondes dulce en el orgullo
pequeña y dulce
corazón coraza

porque eres mía
porque no eres mía
porque te miro y muero
y peor que muero
si no te miro amor
si no te miro

porque tú siempre existes dondequiera
pero existes mejor donde te quiero
porque tu boca es sangre
y tienes frío
tengo que amarte amor
tengo que amarte
aunque esta herida duela como dos
aunque te busque y no te encuentre
y aunque
la noche pase y yo te tenga
y no.


Estados de ánimo

A veces me siento
como un águila en el aire.
-Pablo Milanés

Unas veces me siento
como pobre colina
y otras como montaña
de cumbres repetidas.

Unas veces me siento
como un acantilado
y en otras como un cielo
azul pero lejano.

A veces uno es
manantial entre rocas
y otras veces un árbol
con las últimas hojas.
Pero hoy me siento apenas
como laguna insomne
con un embarcadero
ya sin embarcaciones
una laguna verde
inmóvil y paciente
conforme con sus algas
sus musgos y sus peces,
sereno en mi confianza
confiando en que una tarde
te acerques y te mires,
te mires al mirarme.


Hagamos un trato

Cuando sientas tu herida sangrar
cuando sientas tu voz sollozar
cuenta conmigo.

(de una canción de Carlos Puebla)

Compañera,
usted sabe
que puede contar conmigo,
no hasta dos ni hasta diez
sino contar conmigo.

Si algunas veces
advierte
que la miro a los ojos,
y una veta de amor
reconoce en los míos,
no alerte sus fusiles
ni piense que deliro;
a pesar de la veta,
o tal vez porque existe,
usted puede contar
conmigo.

Si otras veces
me encuentra
huraño sin motivo,
no piense que es flojera
igual puede contar conmigo.

Pero hagamos un trato:
yo quisiera contar con usted,
es tan lindo
saber que usted existe,
uno se siente vivo;
y cuando digo esto
quiero decir contar
aunque sea hasta dos,
aunque sea hasta cinco.

No ya para que acuda
presurosa en mi auxilio,
sino para saber
a ciencia cierta
que usted sabe que puede
contar conmigo.


Lovers go home!

Ahora que empecé el día
volviendo a tu mirada,
y me encontraste bien
y te encontré más linda.

Ahora que por fin
está bastante claro
dónde estás y dónde estoy.

Sé por primera vez
que tendré fuerzas
para construir contigo
una amistad tan piola,
que del vecino
territorio del amor,
ese desesperado,
empezarán a mirarnos
con envidia,
y acabarán organizando
excursiones
para venir a preguntarnos
cómo hicimos.


Pasatiempo

Cuando éramos niños
los viejos tenían como treinta
un charco era un océano
la muerte lisa y llana
no existía.

Luego cuando muchachos
los viejos eran gente de cuarenta
un estanque un océano
la muerte solamente
una palabra.

Ya cuando nos casamos
los ancianos estaban en cincuenta
un lago era un océano
la muerte era la muerte
de los otros.

Ahora veteranos
ya le dimos alcance a la verdad
el océano es por fin el océano
pero la muerte empieza a ser
la nuestra.


Rostro de vos

Tengo una soledad
tan concurrida
tan llena de nostalgias
y de rostros de vos
de adioses hace tiempo
y besos bienvenidos
de primeras de cambio
y de último vagón.

Tengo una soledad
tan concurrida
que puedo organizarla
como una procesión
por colores
tamaños
y promesas
por época
por tacto
y por sabor.

Sin temblor de más
me abrazo a tus ausencias
que asisten y me asisten
con mi rostro de vos.

Estoy lleno de sombras
de noches y deseos
de risas y de alguna
maldición.

Mis huéspedes concurren
concurren como sueños
con sus rencores nuevos
su falta de candor
yo les pongo una escoba
tras la puerta
porque quiero estar solo
con mi rostro de vos.

Pero el rostro de vos
mira a otra parte
con sus ojos de amor
que ya no aman
como víveres
que buscan su hambre
miran y miran
y apagan mi jornada.

Las paredes se van
queda la noche
las nostalgias se van
no queda nada.

Ya mi rostro de vos
cierra los ojos
y es una soledad
tan desolada.


Si Dios fuera una mujer

¿y si Dios fuera una mujer?
-Juan Gelman


¿Y si Dios fuera mujer?
pregunta Juan sin inmutarse,
vaya, vaya si Dios fuera mujer
es posible que agnósticos y ateos
no dijéramos no con la cabeza
y dijéramos sí con las entrañas.

Tal vez nos acercáramos a su divina desnudez
para besar sus pies no de bronce,
su pubis no de piedra,
sus pechos no de mármol,
sus labios no de yeso.

Si Dios fuera mujer la abrazaríamos
para arrancarla de su lontananza
y no habría que jurar
hasta que la muerte nos separe
ya que sería inmortal por antonomasia
y en vez de transmitirnos SIDA o pánico
nos contagiaría su inmortalidad.

Si Dios fuera mujer no se instalaría
lejana en el reino de los cielos,
sino que nos aguardaría en el zaguán del infierno,
con sus brazos no cerrados,
su rosa no de plástico
y su amor no de ángeles.

Ay Dios mío, Dios mío
si hasta siempre y desde siempre
fueras una mujer
qué lindo escándalo sería,
qué venturosa, espléndida, imposible,
prodigiosa blasfemia.


Síndrome

Todavía tengo casi todos mis dientes
casi todos mis cabellos y poquísimas canas
puedo hacer y deshacer el amor
trepar una escalera de dos en dos
y correr cuarenta metros detrás del ómnibus
o sea que no debería sentirme viejo
pero el grave problema es que antes
no me fijaba en estos detalles.


Táctica y estrategia

Mi táctica es
mirarte
aprender como sos
quererte como sos.

Mi táctica es
hablarte
y escucharte
construir con palabras
un puente indestructible.

Mi táctica es
quedarme en tu recuerdo
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
pero quedarme en vos.

Mi táctica es
ser franco
y saber que sos franca
y que no nos vendamos
simulacros
para que entre los dos

no haya telón
ni abismos.

Mi estrategia es
en cambio
más profunda y más
simple.

Mi estrategia es
que un día cualquiera
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
por fin me necesites.


Te quiero

Tus manos son mi caricia,
mis acordes cotidianos;
te quiero porque tus manos
trabajan por la justicia.

Si te quiero es porque sos
mi amor, mi cómplice, y todo.
Y en la calle codo a codo
somos mucho más que dos.

Tus ojos son mi conjuro
contra la mala jornada;
te quiero por tu mirada
que mira y siembra futuro.

Tu boca que es tuya y mía,
Tu boca no se equivoca;
te quiero por que tu boca
sabe gritar rebeldía.

Si te quiero es porque sos
mi amor mi cómplice y todo.
Y en la calle codo a codo
somos mucho más que dos.

Y por tu rostro sincero.
Y tu paso vagabundo.
Y tu llanto por el mundo.
Porque sos pueblo te quiero.

Y porque amor no es aurora,
ni cándida moraleja,
y porque somos pareja
que sabe que no está sola.

Te quiero en mi paraíso;
es decir, que en mi país
la gente vive feliz
aunque no tenga permiso.

Si te quiero es por que sos
mi amor, mi cómplice y todo.
Y en la calle codo a codo
somos mucho más que dos.


Una mujer desnuda y en lo oscuro

Una mujer desnuda y en lo oscuro
tiene una claridad que nos alumbra
de modo que si ocurre un desconsuelo
un apagón o una noche sin luna
es conveniente y hasta imprescindible
tener a mano una mujer desnuda.

Una mujer desnuda y en lo oscuro
genera un resplandor que da confianza
entonces dominguea el almanaque
vibran en su rincón las telarañas
y los ojos felices y felinos
miran y de mirar nunca se cansan.

Una mujer desnuda y en lo oscuro
es una vocación para las manos
para los labios es casi un destino
y para el corazón un despilfarro
una mujer desnuda es un enigma
y siempre es una fiesta descifrarlo.

Una mujer desnuda y en lo oscuro
genera una luz propia y nos enciende
el cielo raso se convierte en cielo
y es una gloria no ser inocente
una mujer querida o vislumbrada
desbarata por una vez la muerte.

silvia nathalia plazas baron 11-02

jueves, 15 de octubre de 2009

MARIO BENEDETTI



MARIO BENEDETTI

Mario Orlando Hardy Hamlet Brenno Benedetti Farrugia[1] (Paso de los Toros, 14 de septiembre de 1920 - Montevideo, 17 de mayo de 2009), más conocido como Mario Benedetti, fue un escritor y poeta uruguayo integrante de la Generación del 45, a la que pertenecen también Idea Vilariño y Juan Carlos Onetti, entre otros. Su prolífica producción literaria incluyó más de 80 libros, algunos de los cuales fueron traducidos a más de 20 idiomas.





PriMeros años

Mario Benedetti nació el 14 de septiembre de 1920 en Paso de los Toros, Uruguay. Fue hijo de Brenno Benedetti y Matilde Farrugia, quienes lo bautizaron con cinco nombres, siguiendo sus costumbres italianas[cita requerida].

Residió en Paso de los Toros junto a su familia durante los primeros dos años de su vida, para luego trasladarse con ellos a Tacuarembó por asuntos de negocios. Luego de una fallida estadía en ese sitio (donde fueron víctimas de una estafa[2] ), la familia se trasladó a Montevideo, cuando Mario Benedetti tenía cuatro años de edad. En 1928 inicia sus estudios primarios en el Colegio Alemán de Montevideo, de donde es retirado en 1933. En consecuencia, ingresa al Liceo Miranda por un año. En 1934 hace ingreso a la Escuela Raumsólica de Logosofía. Sus estudios secundarios los realizó de manera incompleta en 1935, en el Liceo Miranda, para continuar de manera libre, por problemas económicos. Desde los catorce años trabajó en la empresa Will L. Smith, S.A., repuestos para automóviles.

Entre 1938 a 1941 residió casi continuamente en Buenos Aires, Argentina.


Comienzos literarios :

En 1945 se integró al equipo de redacción del semanario Marcha, donde permaneció hasta 1974, año en que fue clausurado por el gobierno de Juan María Bordaberry. En 1954 es nombrado director literario de dicho semanario.

El 23 de marzo de 1946 contrae nupcias con Luz López Alegre, su gran amor y compañera de vida. En 1948 dirige la revista literaria Marginalia. Publica el volumen de ensayos Peripecia y novela.

SILVIA NATHALIA PLAZAS BARON 11-02



En 1949 es miembro del consejo de redacción de Número, una de las revistas literarias más destacadas de la época. Participa activamente en el movimiento contra el Tratado Militar con los Estados Unidos. Es su primera acción como militante. Ese mismo año obtuvo el Premio del Ministerio de Instrucción Pública por su primera compilación de cuentos, Esta mañana. Mario Benedetti fue ganador del galardón en repetidas ocasiones hasta 1958, cuando renunció sistemáticamente a él por discrepancias con su reglamentación.

En 1964 trabaja como crítico de teatro y codirector la página literaria semanal «Al pie de las letras» del diario La mañana. Colabora como humorista en la revista Peloduro. Escribe crítica de cine en La Tribuna Popular. Vuelve a Cuba para participar en el jurado del concurso Casa de las Américas. Participa en el encuentro sobre Rubén Darío. Viaja a México para participar en el II Congreso Latinoamericano de Escritores.

Participa en el Congreso Cultural de La Habana con la ponencia “Sobre las relaciones entre el hombre de acción y el intelectual" y se vuelve Miembro del Consejo de Dirección de Casa de las Américas. En 1968 funda y dirige el Centro de Investigaciones literarias de Casa de las Américas, cargo en el cual se mantendría hasta 1971.[3]

Junto a miembros del Movimiento de Liberación Nacional - Tupamaros, fundó en 1971 el Movimiento de Independientes 26 de Marzo, una agrupación que pasó a formar parte de la coalición de izquierdas Frente Amplio desde sus orígenes. Benedetti fue representante del Movimiento 26 de Marzo en la Mesa Ejecutiva del Frente Amplio desde 1971 a 1973, sin embargo, esta alternativa se vio frustrada por la fuerza.[3] Además es nombrado director del Departamento de Literatura Hispanoamericana en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Universidad de la República, de Montevideo.

Publica Crónica del 71, compuesto en su mayoría de editoriales políticos publicados en el semanario Marcha, así como de un poema inédito y tres discursos pronunciados durante la campaña del Frente Amplio. También publica Los poemas comunicantes, con entrevistas a diversos poetas latinoamericanos.
La literatura colombiana, como manifestación de cultura, es mestiza, tropical y diversa. La lucha constante de los legados español, indígena y negro, y la lucha misma en contra de manifestaciones exteriores, producen en Colombia la constante búsqueda por una voz nacional.



Literatura Indígena [editar]La voz indígena, pobladora original de lo que hoy es Colombia, es paradójicamente la que menos sobrevive. La violencia de los conquistadores y sus esfuerzos por imponer sus costumbres causaron la pérdida de textos legendarios. Algunos de los textos sobrevivientes:

Leyenda de Yurupary. Narración de origen amazónico, escrita por el indio José Roberto y traducida al italiano por el conde Ermanno Stradelli. Yurupary es un héroe mítico, conocido en Brasil y Colombia.




Literatura Colonial [editar]La Época de la Colonia o Época Hispánica estuvo influenciada culturalmente por lo religioso. Para aquel entonces, mediados del Siglo XVI, se empezaban a establecer los primeros asentamientos urbanos, alrededor de las instituciones gubernamentales españolas. El capital económico, político y cultural era propiedad de una pequeña élite, por lo cual la creación de textos literarios provenía en exclusiva de las clases altas.

Los intelectuales españoles y criollos se enfrentaron a un nuevo mundo listo para ser retratado, por eso las primeras manifestaciones literarias sirven mayormente como crónicas, donde se da cuenta de las tradiciones, los quéhaceres cotidianos y los hechos heróicos del nuevo continente.

Se destacan:

Hernando Domínguez Camargo (Bogotá, 1606 - Tunja, 1659), sacerdote jesuita y escritor. Influenciado notablemente por el gran poeta barroco Luis de Góngora y Argote, haría parte del llamado Barroco de Indias, en donde también se ubica a Sor Juana Inés de la Cruz. Sus obras más reconocidas son su relato épico Poema heroico de San Ignacio de Loyola (1966) y Ramillete de varias flores poéticas (1967).
Francisco Álvarez de Velasco y Zorrilla (Bogotá, 1647 - Madrid, 1708) era hijo de un oidor neogranadino y de la hija de un oidor de Quito. Desde muy temprano recibió formación religiosa y ejerció la vida política. Su obra fue recogida en el libro Rhytmica Sacra, Moral y Laudatiria. Al contrario de Domínguez Camargo, era un gran admirador de Francisco de Quevedo y era reticente con respecto al gongorismo, con la excepción de Sor Juana Inés de la Cruz a quien le escribió desconociendo que había muerto. Velasco y Zorrilla asume el nuevo lenguaje americano -sus modismos- con orgullo, por lo que se ha ganado el reconocimiento como 'primer poeta americano'. También se le atribuye ser precursor del neoclasicismo. Se destaca su poema Vuelve a su quinta, ah friso, solo y viudo en donde relata el triste reencuentro del hombre viudo con su hogar y cómo la ausencia de su amada transforma el ambiente para el que llega y para los que están.
Francisca Josefa del Castillo. Religiosa tunjana, reconocida como una de las autoras místicas más destacadas de América Latina, llegando a ser comparada con sor Juana Inés de la Cruz.
Juan de Castellanos. (Sevilla, 1522 - Tunja, 1607) Sacerdote español, residente en Tunja por más de cuarenta años, autor del más extenso poema jamás escrito en lengua española, las Elegías de Varones Ilustres de Indias.
Juan Rodríguez Freyle. (Bogotá, 1566 - 1642) Autor
de la monumental obra crónica ‘‘El Carnero

SILVIA NATHALIA PLAZAS 11-02

miércoles, 7 de octubre de 2009

Pablo Neruda



Ricardo Eliécer Neftalí Reyes Basoalto[1] (Parral, 12 de julio de 1904Santiago de Chile, 23 de septiembre de 1973) conocido por el seudónimo y, más tarde, el nombre legal de Pablo Neruda, fue un poeta chileno, considerado uno de los mayores y más influyentes de su siglo, siendo llamado por el novelista Gabriel García Márquez "el más grande poeta del siglo XX en cualquier idioma".[2] También fue un destacado activista político, siendo Senador de la República, integrante del Comité Central del Partido Comunista y pre-candidato a la Presidencia. Entre sus múltiples reconocimientos destacan el Premio Nobel de Literatura en 1971 y un Doctorado Honoris Causa por la Universidad de Oxford. En palabras del crítico Harold Bloom ningún poeta del hemisferio occidental de nuestro siglo admite comparación con él.[3] Pablo Neruda era descendiente de vascos por parte materna.[4]


Primeros años
Hijo de José del Carmen Reyes Morales, obrero ferroviario, y Rosa Neftalí Basoalto Opazo, maestra de escuela fallecida debido a una tuberculosis cuando Neruda tenía un mes de edad[5] . En 1906, la familia se trasladó a Temuco, donde su padre se casa en segundas nupcias con Trinidad Candia Marverde a quien Neruda llamará "madre"[1] en diversos textos como en Confieso que he vivido y Memorial de Isla Negra[6] Neruda ingresa al Liceo de Hombres de Temuco, donde cursa todos sus estudios hasta terminar el 6º año de humanidades en 1920[5] . El impresionante entorno natural de Temuco, sus bosques, lagos, ríos y montañas marcarán para siempre el mundo poético de Neruda.

Fotografía del joven Neruda, aún firmando como Ricardo Reyes
En 1917, publica su primer artículo en el diario La Mañana de Temuco, con el título de «Entusiasmo y perseverancia» En esta ciudad escribió gran parte de los trabajos, que pasarían a integrar su primer libro de poemas: Crepusculario[6] .
Entre 1918 y 1919, publica diversos poemas en la revista Corre-Vuela de Santiago, con el seudónimo de Neftalí Reyes.
En 1919, obtiene el tercer lugar en los Juegos Florales del Maule con su poema «Comunión Ideal[1] » o «Nocturno Ideal»[5] . En 1920 comienza a contribuir con la revista literaria Selva Austral .
En ese mismo período, conoce a Gabriela Mistral, de cuyo encuentro recordará: “… ella me hizo leer los primeros grandes nombres de la literatura rusa que tanta influencia tuvieron sobre mí”[1] . En octubre, firma definitivamente sus trabajos con el seudónimo de Pablo Neruda[1] .
En 1921 se radica en Santiago y estudia pedagogía en idioma francés en el Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile, donde obtiene el primer premio de la fiesta de la primavera con el poema «La canción de fiesta», publicado posteriormente en la revista Juventud. En 1923, publica Crepusculario, que es reconocido por escritores como Hernán Díaz Arrieta, Raúl Silva Castro y Pedro Prado[6] .
En 1924 publica su famoso Veinte poemas de amor y una canción desesperada, en el que todavía se nota una influencia del modernismo. Posteriormente se manifiesta un propósito de renovación formal de intención vanguardista en tres breves libros publicados en 1926: El habitante y su esperanza, Anillos (en colaboración con Tomás Lago) y Tentativa del hombre infinito. En 1927, comienza su larga carrera diplomática siendo cónsul en Rangún, Birmania, desde donde se desarrolla un notable epistolario con el escritor Argentino Héctor Eandi. Será luego cónsul en Sri Lanka, Java, Singapur, Buenos Aires, Barcelona y Madrid. En sus múltiples viajes conoce en Buenos Aires a Federico García Lorca y en Barcelona a Rafael Alberti. Pregona su concepción poética de entonces, la que llamó "poesía impura", y experimenta el poderoso y liberador influjo del Surrealismo. En 1935, Manuel Altolaguirre le entrega la dirección a Neruda de la revista Caballo verde para la poesía, en la cual es compañero de los poetas de la Generación del 27. Ese mismo año aparece la edición madrileña de Residencia en la tierra.
El 6 de diciembre de 1930 se casa con María Antonieta Haagenar Vogelzanz[1] "Maruca". De la unión nace en 1934 Malva Marina Trinidad, nacida con hidrocefalia y que murió en 1943, a los ocho años. Neruda se separó de Haagenar en 1936 (se divorciaría de ella a distancia, en México, en 1942).
[editar] Guerra Civil Española

Neruda en 1956.
En 1936 estalla la Guerra Civil Española. Conmovido por la guerra y el asesinato de su amigo García Lorca,[1] [6] Neruda se compromete con el movimiento republicano, primero en España y luego —ya desplazado de su cargo diplomático— en Francia, donde comienza a escribir España en el corazón (1937). En ese año regresa a Chile, y su poesía durante el período siguiente se caracterizará por una orientación hacia cuestiones políticas y sociales, lo que refuerza sus grandes ventas de libros.
En 1939 es designado, por el presidente Aguirre Cerda, cónsul especial para la inmigración española en París, donde destaca como el gestor del proyecto Winnipeg, barco que llevaría a cerca de 2.000 inmigrantes españoles desde Francia a Chile. Poco tiempo después, es asignado como Cónsul General en México, donde reescribe su Canto General de Chile transformándolo en un poema del continente sudamericano. Esta obra, titulada Canto General, fue publicada en México en 1950, y también clandestinamente en Chile. Compuesta de unos 250 poemas en quince ciclos literarios, constituye (a juicio del propio Neruda) la parte central de su producción artística. Al poco tiempo de publicado, Canto General fue traducido a alrededor de diez idiomas. Casi todos los poemas que lo componen fueron creados en circunstancias particularmente difíciles, cuando Neruda vivía en el exilio.
[editar] Carrera política

Neruda junto a su esposa Delia de Carril y Erich Honecker en 1951.
Habiendo retornado a Chile en 1943 —año en que se casó con Delia de Carril, "la Hormiguita", en un matrimonio luego declarado ilegal por la justicia chilena—. Neruda recibe el Premio Nacional de Literatura en 1945. En ese año es electo Senador de la República por las provincias de Tarapacá y Antofagasta.[5] Se unirá al Partido Comunista de Chile, donde militaban sus dos más férreos rivales, los poetas Pablo de Rokha y Vicente Huidobro, con quienes protagonizaría de por vida las más ácidas rencillas.
En las elecciones presidenciales chilenas de 1946 triunfa la Alianza Democrática, una coalición integrada por radicales, comunistas y demócratas, que lleva al poder a Gabriel González Videla. La represión desencadenada por este último contra los trabajadores mineros en huelga llevará a Neruda a protestar vehementemente en el Senado.
La persecución desatada por el gobierno de González Videla contra sus antiguos aliados comunistas, mediante la Ley de Defensa Permanente de la Democracia, culminará en la prohibición del Partido Comunista el 3 de septiembre de 1948. Esto provoca el desafuero y una orden de detención contra Neruda, forzándolo primero a la clandestinidad en su propio país, y luego al exilio.
[editar] Exilio
Neruda realiza la travesía para escapar de una persecución política durante el otoño de 1949. Por ello, vive meses en la clandestinidad entre Santiago, Valdivia y la comuna de Futrono,[7] en el lago Huishue, cruza por el paso de Lilpela desde Chile hacia Argentina montado a caballo; estuvo a punto de ahogarse mientras cruzaba el río Curringue.
A mediados de abril llega de incógnito a París y protegido por varios amigos, entre ellos Picasso,[1] para finalmente regularizar su situación. Reaparece públicamente en la sesión de clausura del Primer Congreso Mundial de Partidarios de la Paz y es nombrado miembro del Consejo Mundial de la Paz. Desde Europa emprende numerosos viajes: Checoeslovaquia, Unión Soviética, Polonia, Hungría, México.
En su exilio fue a vivir a Nápoles, donde después de 6 años recibió una carta en donde se le informaba que ya no era buscado. Entonces volvió a su país de origen, Chile.
[editar] Regreso a Chile

Neruda tras recibir el Premio Nobel de Literatura en 1971.
El 12 de agosto de 1952 regresa a Almatriche, donde es recibido con un gran acto público. Publica Los versos del capitán y en 1954 Las uvas y el viento (en donde se encuentra una elegía a Stalin) y Odas elementales. En 1953 recibe el Premio Stalin de la Paz. En 1955 se separa de su esposa Delia, y comienza a vivir con Matilde Urrutia. En 1958 aparece Estravagario con un nuevo cambio en su poesía. En 1965 se le otorga el título de doctor honoris causa en la Universidad de Oxford, Gran Bretaña.
En 1966 contrae matrimonio con Matilde Urrutia en una sencilla ceremonia civil y privada en su casa de Isla Negra. Allí conserva sus particulares colecciones de caracolas y mascarones de proa.
En 1969 es nombrado “Miembro honorario” de la Academia Chilena de la Lengua. Ese año, durante la campaña para la Elección presidencial de Chile (1970), el Partido Comunista lo elige como pre-candidato, pero renuncia en favor de Salvador Allende como candidato único de la Unidad Popular, que triunfa en las elecciones de 1970. El gobierno de la Unidad Popular lo designa Embajador en Francia.
[editar] Premio Nobel de Literatura
El 21 de octubre de 1971 le es concedido el Premio Nobel de Literatura. Viaja a Estocolmo a recibirlo el 10 de diciembre de 1971. En sus Memorias el poeta recuerda: “El anciano monarca nos daba la mano a cada uno; nos entregaba el diploma, la medalla y el cheque (...) Se dice (o se lo dijeron a Matilde para impresionarla) que el rey estuvo más tiempo conmigo que con los otros laureados, que me apretó la mano con evidente simpatía. Tal vez haya sido una reminiscencia de la antigua gentileza palaciega hacia los juglares”. Neruda recibió una sorpresa de varios escritores famosos que lo admiraban por sus obras y además por su vida ejemplar. Entre los escritores estaban Octavio Paz, Gumercindo Arguaye y Gabriel García Márquez.
[editar] Muerte

Féretro de Pablo Neruda.
Su última aparición en público fue en 5 de diciembre de 1972, donde el pueblo chileno realizó un homenaje al poeta en el Estadio Nacional.
En febrero de 1973, por razones de salud, renuncia a su cargo de embajador de Chile en Francia.
El 19 de septiembre, al agravarse su salud, es trasladado de urgencia desde su casa de Isla Negra a Santiago. Finalmente, el 23 de septiembre, Pablo Neruda muere a las 22.30 en la Clínica Santa María de Santiago debido a un cáncer de próstata.
Pocos días antes, el 11 de septiembre, el gobierno de Allende había sido violentamente derrocado por el golpe de Estado encabezado por el general Augusto Pinochet, y la casa de Neruda en Santiago había sido saqueada y sus libros incendiados. Su funeral fue realizado en el Cementerio General, rodeado de soldados armados de ametralladoras. Aun así, se escuchaban desafiantes gritos de homenaje a él y a Salvador Allende, junto a la entonación de La Internacional.
El 11 de diciembre de 1992, los restos de Neruda y Matilde Urrutia son exhumados y llevados para un velatorio ceremonial en el Salón de Honor del ex Congreso Nacional. Al día siguiente se da cumplimiento al deseo del poeta: que su cuerpo fuese enterrado en su casa de Isla Negra. Ese lugar y todas las demás pertenencias son ahora museos administrados por la Fundación Neruda.
[editar] Obras
[editar] Publicadas en vida

Neruda durante una visita a Estados Unidos en 1966.
Crepusculario. Santiago, Ediciones Claridad, 1923.
Veinte poemas de amor y una canción desesperada. Santiago, Editorial Nascimento, 1924.
Tentativa del hombre infinito. Santiago, Editorial Nascimento, 1926.
Anillos Santiago, Editorial Nascimento, 1926. (Prosa poética de Pablo Neruda y Tomás Lago.)
El hondero entusiasta Santiago, Empresa Letras, 1933.
El habitante y su esperanza. Novela. Santiago, Editorial Nascimento, 1926.
Residencia en la tierra (1925–1931). Madrid, Ediciones del Árbol, 1935.
España en el corazón. Himno a las glorias del pueblo en la guerra: (1936–1937). Santiago, Ediciones Ercilla, 1937.
Nuevo canto de amor a Stalingrado. México, 1943.
Tercera residencia (1935–1945). Buenos Aires, Losada, 1947.
Canto general. México, Talleres Gráficos de la Nación, 1950.
Los versos del capitán. Imprenta L'Arte Tipografica, Napoli, 1952, 184 pp.
Todo el amor. Santiago, Editorial Nascimento, 1953.
Las uvas y el viento. Santiago, Editorial Nascimento, 1954.
Odas elementales. Buenos Aires, Editorial Losada, 1954.
Nuevas odas elementales. Buenos Aires, Editorial Losada, 1955.
Tercer libro de las odas. Buenos Aires, Losada, 1957.
Estravagario. Buenos Aires, Editorial Losada, 1958.
Navegaciones y regresos Buenos Aires, Editorial Losada, 1959.
Cien sonetos de amor. Santiago, Editorial Universitaria, 1959.
Canción de gesta. La Habana, Imprenta Nacional de Cuba, 1960.
Poesías: Las piedras de Chile. Buenos Aires, Editorial Losada, 1960.
Cantos ceremoniales. Buenos Aires, Losada, 1961.
Memorial de Isla Negra. Buenos Aires, Losada, 1964. 5 volúmenes.
Arte de pájaros. Santiago, Ediciones Sociedad de Amigos del Arte Contemporáneo, 1966.
Fulgor y muerte de Joaquín Murieta. Santiago, Zig-Zag, 1967. La obra fue escrita con la intención de servir de libreto para una ópera de Sergio Ortega.
La Barcarola. Buenos Aires, Losada, 1967.
Las manos del día. Buenos Aires, Losada, 1968.
Comiendo en Hungría. Editorial Lumen, Barcelona, 1969. (En co-autoría con Miguel Ángel Asturias)
Fin del mundo. Santiago, Edición de la Sociedad de Arte Contemporáneo, 1969. Con Ilustraciones de Mario Carreño, Nemesio Antúnez, Pedro Millar, María Martner, Julio Escámez y Osvaldo Guayasamín.
Aún. Editorial Nascimento, Santiago, 1969.
Maremoto. Santiago, Sociedad de Arte Contemporáneo, 1970. Con Xilografías a color de Carin Oldfelt Hjertonsson.
La espada encendida. Buenos Aires, Losada, 1970.
Las piedras del cielo. Editorial Losada, Buenos Aires, 1970.
Discurso de Estocolmo. Alpignano, Italia, A. Tallone, 1972.
Geografía infructuosa Buenos Aires, Editorial Losada, 1972.
La rosa separada. Éditions du Dragon, Paris, 1972 con grabados de Enrique Zañartu.
Incitación al Nixonicidio y alabanza de la revolución chilena. Santiago, Empresa Editora Nacional Quimantú, Santiago, 1973.
Geografía de Pablo Neruda. Editorial Aymá, Barcelona, 1973. Glosas autógrafas de Neruda, Fotos de Sara Facio y Alicia D'Amico.
[editar] Publicación póstuma

Neruda en su última aparición en público (1972).
El mar y las campanas. Editorial Losada, Buenos Aires, 1973
2000. Editorial Losada, Buenos Aires, 1974
Elegía. Editorial Losada, Buenos Aires, 1974.
El corazón amarillo. Editorial Losada, Buenos Aires, 1974
Jardín de invierno. Editorial Losada, Buenos Aires, 1974.
Confieso que he vivido. Memorias. Barcelona, Seix Barral, 1974. (autobiografía)
Cartas de amor de Pablo Neruda. Ediciones Rodas, Madrid, 1975.
Para nacer he nacido. Editorial Seix Barral, Barcelona, 1978.
Cartas a Laura. Centro Iberoamericano de Cooperación, Madrid, 1978.
Poesías escogidas. Biblioteca Premios Nobel. Aguilar S.A. de ediciones, 1980.
El río invisible Editorial Seix Barral, Barcelona, 1980.
Neruda/Eandi, Correspondencia durante Residencia en la tierra. Editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1980.
El fin del viaje. Editorial Seix Barral, Barcelona, 1982.
Pablo Neruda, Discursos Parlamentarios. (1945-1948). Editorial Antártica, Santiago, 1997.
Pablo Neruda, Cuadernos de Temuco Seix Barral, Buenos Aires.
Pablo Neruda, Prólogos. Editorial Sudamericana, Santiago, 2000.
Pablo Neruda, Epistolario viajero. (1927-1973)Editorial RIL, Santiago, 2004.
Pablo Neruda en O’Cruzeiro Internacional. Editorial Puerto de Palos, Santiago, 2004.
Pablo Neruda. Yo respondo con mi obra: Conferencias, Discursos, Cartas, Declaraciones. (1932 - 1959). Ediciones Universidad de Salamanca, Salamanca, España, 2004.
David Bautista. Yo respondo con mi obra: tus ojos, Discursos, Cartas, Declaraciones. (1932 - 1959). Ediciones Universidad de Salamanca, Salamanca, España, 2004.
Pablo Neruda, J.M. Coetzee, W. Faulkner, Doris Lessing, G.G. Márquez, Discursos, Alpha Decay, Barcelona, 2008.
[editar] Curiosidades

Casa de Neruda en Isla Negra, donde reposan los cuerpos de Neruda y su mujer Matilde Urrutia, que actualmente es un museo en honor del premio Nobel chileno.
La obra Ardiente Paciencia de Antonio Skármeta. Llevada al cine en 1983. Protagonizada por Marcela Osorio, describe a Neruda en 1970 -73
Il Postino Remake italo-estadounidense de la obra Ardiente Paciencia. Obtuvo un Oscar y cuatro nominaciones en 1994. Realizado por el director Michael Radford y protagonizada por Massimo Troisi, describe a Neruda durante su exilio en la isla de Capri en los 50´s
La novela El Caso Neruda escrita por Roberto Ampuero describe los días previos al Golpe de Estado de 1973 y a un Neruda en sus últimos días que le encomienda su primera misión detectivesca al personaje principal Cayetano Brulé y tiene una gran relevancia en su vida personal.
En la canción ''Mujeres'' de Ricardo Arjona se hace mención a su nombre haciendo la pregunta de qué habría escrito éste si no existiesen las mujeres.
En Chile se está revisando la posibilidad de poner la imagen de Neruda en una moneda.
El escritor Jorge Luis Borges siempre criticó la obra de los escritores politizados, entre los que incluía a Neruda. Decía que su fama siempre era extra literaria. De la obra de Pablo Neruda, expresó una vez que lo mejor era "su parte política", dando a entender que incluso su poesía era de baja calidad.[8]
Si bien existe un asteroide llamado Neruda, es posible que su descubridor, el checo Luboš Kohoutek, lo bautizara así por el autor también checo Jan Neruda.
La canción "Bachata Rosa" de Juan Luis Guerra, basa sus primeros versos en un poema de Neruda...
En la serie televisiva Los Simpson se hace referencia a Neruda en el capitulo en el cual Bart vende su alma, Lisa le dice a este después de ver que no podía reír "Neruda dice que la risa es el lenguaje del alma".


edwin sneyder cobos 11-02

Generos literarios



El género literario es un sistema que permite la clasificación de obras literarias de acuerdo a criterios semánticos, sintácticos, fónicos, discursivos, formales, contextuales, situacionales y afines. En la historia ha habido varias clasificaciones de los géneros literarios. Por lo cual no se puede asistir a una determinación en la cual se pueda categorizar todas las obras de la historia en un criterio común.
Los géneros literarios son modelos de estructuración formal y temática de la obra literaria que se ofrecen al autor como esquema previo a la creación de su obra. Los géneros literarios son los distintos grupos o categorías en que podemos clasificar las obras literarias atendiendo a su contenido. La retórica clásica los ha clasificado en tres grupos importantes: lírico, épico y dramático. A éstos algunos suelen añadir el didáctico.


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